Diferencias entre El Falso Despertar y El Despertar (2ª parte)

El Falso Despertar es seguir creyendo que el Amor es especial y que tenemos que hacer cosas extrañas para merecerlo y también para darlo, pues no todos merecen nuestro amor.

El Despertar es saber que el Amor es impersonal y que al darlo, nos damos cuenta de que es lo que Somos.

El Falso Despertar es seguir creyendo en el ataque y ponerme a la defensiva cuando los demás rechazan mis creencias espirituales. El Despertar es entender que solamente puedo llegar a ser invulnerable si me vuelvo completamente indefenso. Pues en mi indefensión radica la prueba de que he dejado de creer en el ataque, ya que nunca fue real.

El Falso Despertar es sentirme diferente y especial. El Despertar es saber que todos somos Uno y que no existen grados de comparación reales.

El Falso Despertar es creer que las relaciones especiales me liberarán del sufrimiento. El Despertar es saber que solo el ego es el que me impide vivir el Cielo en la Tierra.

El Falso Despertar es pensar que si como o dejo de comer ciertas cosas, seré más espiritual. El Despertar es saber que no es importante lo que entra en la boca del hombre, sino lo que sale de su corazón.

El Falso Despertar es pensar que llevar ropa de ciertos colores me hace diferente y más espiritual que otros. El Despertar es saber que dicha creencia sólo me separa de los demás y de mi Verdadera Identidad, y que nada que parece ser externo a mí tiene efecto real sobre lo que Soy y nunca dejé de Ser.

El Falso Despertar es seguir creyendo en la enfermedad. El Despertar es saber que no soy un cuerpo, y que lo que llamamos enfermedad es uno de los pilares que el ego utiliza para hacerme sentir vulnerable y débil.

El Falso Despertar es seguir pensando que los principios mágicos (sean alopáticos o naturales) me van a sanar.

El Despertar es saber que la enfermedad no existe, y que si bien ciertos principios mágicos pueden aliviar mi dolor, quien realmente piensa que está enferma es mi mente y es la que necesita sanación/corrección.

El Falso Despertar es creer que nos tenemos que proteger de las malas energías. El Despertar es saber que no existe buena o mala energía, y que nada externo a mí puede amarme o hacerme daño, porque no hay nada externo a mí.

El Falso Despertar es seguir creyendo en la carencia y pensar que para ser espiritual, hay que ser pobre. El Despertar es saber que todo en la Vida es Abundancia, y que si vivo carencia es porque yo mismo me estoy privando.

El Falso Despertar es creer que es muy difícil llegar a Dios. El Despertar es saber que cada vez que miras a los ojos de tus hermanos, o te miras a ti mismo en el espejo, es Dios quien te devuelve la mirada.

El Falso Despertar es pensar que estoy despierto, cuando el ego espiritual me ha adormecido más aún, haciendo que ahora juzgue más severamente al mundo y siga haciendo el sueño real. El Despertar es tener la humildad de reconocer que Soy el Hijo de Dios, que no puedo sufrir, atacar o ser atacado, herir o ser herido, porque Dios es Amor, y por lo tanto, eso es lo que Yo Soy. Así, mi función es liberarme a Mí Mismo y a Mis Hermanos, que son Uno Conmigo, para recordarlo.